ATAQUE AO VAZIO

Se acuerdan de esto ? Bueno , los pixadores de Sao Paolo no paran ... y van por mas !


Unos 50 artistas urbanos intervinieron democráticamente la Bienal de San Pablo
Al atardecer del domingo 26 de octubre, un grupo de 50 graffiteros provistos de aerosoles lograron romper el cordón de seguridad en el segundo piso del Pabellón de la Bienal, construido por el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer.




via CHOQUE PHOTOS

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ATAQUE AL VACIO
http://www.wokitoki.org/pagina/130
Ataque al “vacío”
Por WKTK // 28 de octubre de 2008
Unos 50 artistas urbanos intervinieron democráticamente la Bienal de San Pablo
Al atardecer del domingo 26 de octubre, un grupo de 50 graffiteros provistos de aerosoles lograron romper el cordón de seguridad en el segundo piso del Pabellón de la Bienal, construido por el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer.




No es la primera vez que los activos artistas paulistas intervienen el cerco de los sitios institucionales supuestamente dedicados a la expresión cultural.


Entre los grupos participantes de la acción estaban Arte secreto, Susto y 4.
Además de obra espontánea, escribieron consignas como Abajo la dictadura, Esto sí que es arte y Fuera Serra, en referencia al gobernador de San Pablo, José Serra. Ivo Mesquita (Río de Janeiro, 1947), curador de la muestra había anunciado que la 28ª edición de la Bienal de San Pablo iba a ser una bienal sin obras de arte. Entre otros argumentos para sostener su decisión había declarado:
En el primer catálogo de la primera bienal, el director escribió que su propósito era hacer de la ciudad un gran centro cosmopolita de arte y poner a los artistas brasileños en vivo contacto con el arte del mundo. A partir de esa idea me di cuenta de que este objetivo ya había sido cumplido. São Paulo tenía entonces 2 museos, hoy tiene 6, 4 centros culturales, treinta galerías de arte. La bienal tenía una misión, y ésta se ha logrado. ¿Cuál es el papel, entonces, para la bienal en el siglo XXI?
No se puede olvidar que el modelo de bienal de arte viene de Venecia, del siglo XIX. Y ahora están también las ferias de arte, que son escaparates. Al lado de eso hace falta redefinir la relación de la bienal con la ciudad, con el país, pero también en relación al hecho de que en los años cincuenta era la tercera bienal que se instituyó en el mundo y la primera en el hemisferio Sur. Y así fue hasta los años setenta. Hoy hay casi 200 bienales en el mundo. Venecia sigue activa, es como el museo de las bienales. La de São Paulo fue siempre más vanguardista. Mientras Venecia era una exposición de consagración, São Paulo fue más de obras emergentes, se premiaba a artistas más jóvenes.
Lo del agotamiento se viene diciendo desde los años sesenta. ¡Y había sólo 12 bienales! La crítica a los pabellones nacionales y todo eso. Pero por otro lado, la bienal también tiene que dar cuenta de la diversidad del mundo. Eso que llaman globalización. Venecia, por ejemplo, es la más internacional. O sea, que tiene a veces un artista de cada país, sólo cinco o seis de algunos continentes. A mí me parece que sería más interesante tener una perspectiva regional. De problemas que se plantean más cerca de nosotros, de nuestra identidad. Creo que es importante para las bienales diferenciarse de las ferias de arte, por ejemplo. Las bienales fueron muy eficientes para la estrategia de globalización en crear circuitos internacionales que lleguen a Australia, Asia, etcétera. Pero a eso siguieron las ferias. Primero porque ya en las bienales las obras de arte entraban en un mercado. Además, antes producir arte contemporáneo era muy barato, ahora es muy caro. Las galerías apoyaban a sus artistas en las bienales, pero de pronto les pareció mejor hacerlo en las ferias, durante sólo cinco días, en lugar de los noventa que duran las otras. Por cierto, las galerías siguen apoyando a sus artistas en las bienales, y es fundamental que lo hagan. Si no algunos proyectos no serían posibles.Lo peor de las bienales de hoy es que ya vas a verlas sin ninguna expectativa.
Acudir resulta ya para los profesionales como una tediosa tarea escolar. Una obligación. No suele haber sorpresas. Y lo peor, creemos que se está haciendo algo, pero no. Una de las bienales que más me ha interesado últimamente es la de Mercosur (finalizada el 18 de noviembre de 2007 en Porto Alegre, Brasil). Encajaba muy bien con las dimensiones de la ciudad, con unas perspectivas curatoriales originales. No todas tuvieron éxito, pero asumieron riesgos. Eso me gustó. Se trata de provocar con este gesto y crear una discusión.


Creo que eso ya cumple un objetivo de marketing. También se ha abierto una polémica que creo que va a continuar todo el año. Desde su anuncio se creó una reacción, en muchos casos, muy pasional. Y eso me gustó. Ésa era la idea, una gran provocación. Una crítica de la propia bienal hacia las bienales. Porque si somos los responsables de esta institución tenemos que movernos. Nunca pasará nada si seguimos charlando mientras tomamos copas, quejándonos de lo que ha hecho el comisario de turno. Hay que tomar posición. Es un espacio político. Por eso volvemos a la idea de la plaza como espacio político. Un punto de encuentro para generar algo. La crítica institucional es mi tema favorito del arte contemporáneo.
El mundo del arte está en medio de un voraz proceso de producción, de representación, de consumo, de creación de imágenes, de creación de información. Y las instituciones van fagocitándose unas a otras. Quizá es el momento de parar y pensar un poco: ¿por qué? ¿para qué? ¿a dónde vamos? Esa idea ha sido una de mis preocupaciones de los últimos años Me parecía importante crear un espacio silencioso. Incluso sagrado. Algo que lo diferencie de la voracidad exterior. No quiere decir que esté desconectado de lo que sucede, pero sí que hay que tomarse un tiempo, que todo pueda ir más despacio.


Nunca pasará nada si seguimos quejándonos de lo que ha hecho el comisario de turno. Hay que tomar posición.


Doscientas bienales, ferias, revistas, premios, más arte ... No miramos. Estamos perdiendo el sentido de la mirada.
La acción grafitera había sido convocada en los últimos días por Internet. La curadora de la muestra, Ana Paula Cohen, había dicho el jueves que habían tomado medidas contra la acción de estos grupos, durante la conferencia de prensa de la presentación de la Bienal. Pero la expresión siempre brota.
Mientras muchos de los visitantes aplaudían la acción de los artistas autoconvocados y pedían por su libertad.


Sólo una joven de 23 años fue detenida por los agentes de seguridad

Anónimo dijo...

genial. arte de protesta, en su estado mas puro.

hermoso.